La Fundación de Ayuda contra la Drogadicción (FAD) parece haber perdido total y definitivamente el norte en su nueva campaña contra el "flagelo". Ninguna prueba más palpable de que el calor veraniego reblandece las neuronas que este engendro propagandístico. Dejemos que hable la FAD a través de su nota de prensa:"Este spot, que utiliza un lenguaje claro y directo, muestra de forma sucesiva fotografías de diferentes grupos de jóvenes divirtiéndose en un bar, una piscina, en casa, etc. Mientras estas imágenes van apareciendo en pantalla, una voz infantil entona la famosa canción del ?Pinto, pinto, gorgorito?. Metafóricamente, la voz infantil representa la dimensión de azar que tienen los consumos de drogas, y que no permite asegurar que no se vayan a sufrir consecuencias negativas. Cuando finaliza la locución, la imagen permanece fija en el rostro de una joven.Después una voz en off dice: Las drogas son las que deciden cuando te va a cambiar la vida."
Lo de la voz infantil es ya un clásico en el permanente bombardeo orwelliano de la FAD, que trata de asociar inextricablemente drogas y "niños", pero la novedad está en dotar de vida propia y capacidad de decisión a unas sustancias inertes, incapaces de andar, de saltar y, por supuesto, de decidir nada. La capacidad de las drogas para causarnos daño es inseparable de nuestra decisión de tomarlas, cosa que no ocurre con otras sustancias químicas, como oportunamente nos recordaba Thomas Szasz
"Actualmente existen 45.000 productos quimicos de utilidad comercial: el aire, los alimentos, los liquidos, estan contaminados con productos quimicos. La coca de los peruanos no pone en peligro a los peruanos, ni contamina sus tierras, mientras que la radioactividad sí lo hace. Entre todos los productos quimicos potencialmente peligrosos de nuestro entorno, ninguno es mas dificil de evitar que un elemento radioactivo en el aire, el agua, o la tierra, y ninguno es mas facil de evitar que la cocaina y la heroina"La FAD avanza así un paso más en su cruzada a favor de la negación de la responsabilidad personal, por mucho que cacaree alardeando de todo lo contrario (¿"La educación lo es todo"? XDDDDD!). Con este tipo de eslóganes no se forman hombres responsables, sino robots o infantes perpetuos. Quizás es esto lo que pretende la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción.
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